Esta montaña francesa, Auñamendi en euskera, tiene 2507 m y tanto por su forma piramidal como por su situación es una de las más representativas del extremo occidental pirenaico. La subida normal parte del collado de Ernaz, a 1760 m de altitud, famoso porque aquí está la Piedra de San Martín, ubicación de un antiguo rito, aún vivo.
Hay un buen parking desde el que se empieza a ganar altura con rapidez.
Nos dirigimos al collado de Pescamou, con el valle a nuestra derecha.
Poco a poco vamos adquiriendo sensación de montaña.
El siguiente collado es el de Baticoche, muy espacioso, allí hay un pequeño refugio metálico, que tristemente está cerrado con un cartel de “particular”.
Andamos bajo el pico Latras, que está a nuestro poniente.
Nos adentramos en terreno karstico, nos queda un buen trecho de andar entre rocas, algunos trepes y pasos rocosos. Es el laberinto kárstico de Larra.
Muchas grietas y simas, que con nieve hacen peligroso el tránsito.
Lo mismo ocurre con niebla, pues es bastante difícil encontrar los pasos si no ves los hitos y marcas rojas que nos indican el mejor camino entre este maremagnum calizo.
Seguimos un canal que se dirige más o menos hacia el oeste, ganando altura.
Ya vemos cerca el Col des Anies
Aparecen marcas amarillas también, que nos dirigen hasta el collado del Anies (2085 m) entre el Anie y el Soumcouy.
Desde aquí, algún trepe entre canales y grandes bloques hasta llegar a la base de la pirámide final.
En esta cumbre, vive el hada Maitagarri la más hermosa de los seres mítico vascos.
Nosotros no la vimos, a lo mejor había que esperar a que cayera la noche, de hecho en la misma cumbre hay un pequeño cortar de piedras para vivaquear protegidos del viento, será la próxima vez...
El paisaje es extraordinario, vemos frente a nosotros la Mesa de los Tres Reyes (click para ver su ascensión)
La bajada la hicimos por otro itinerario, para conocer mejor la zona, nos lleva por Le Pourtet. Hay una bifurcación cerca del collado.
Bajamos y entrando por el collado a la cara norte que cruzamos completamente por su base.
Bastante atractiva esta ascensión, compañeros. Un buen ambiente mineral, y por lo que veo, una ruta muy poco transitada en estas fechas... en verano será otra cosa, pues los caminos están bien gastados.
ResponderEliminarNo sería mala cosa dormir arriba y esperar la llegada del hada Maitagarri.
Gracias y un saludo a los dos.
Pues si Fran nos quedamos con las ganas de vivaquear, la próxima vez hay que llevarse el equipo.
EliminarGracias por comentar, un saludo.